Aquí tienes tres metas que puedes proponerte para tu acción diaria, luego no
me digas que no sabes qué hacer, cuando te propones hacer algo bueno:
- No enojarte,
- No enojar a los otros,
- Deshacer los enojos de los demás.
No enojarte tú: por pequeñas o grandes cosas, por sucesos sin relieve o de
proporciones llamativas; no enojarte con tus familiares y no enojarte con
los que te rodean en el trabajo, o con las personas con las que diariamente
debes encontrarte y tratar.
No hacer enojar a los otros: no darles motivo de enojo, de disgustos; no
hacer lo que sabes que a ellos les disgusta o les puede ser causa de enojo;
no ponerlos en tales circunstancias, que ellos deban hacer esfuerzos para
conservar su calma interior.
Deshacer los enojos de los demás: cuando veas que alguien está impaciente,
ofrécele un poco de tu paciencia; cuando alguien necesita ser calmado, dale
tu palabra de paz y serenidad; cuando alguno se extralimite en sus
apreciaciones o expresiones o actitudes, pon tú la cuota de serenidad, de
calma, de paz y de amor.
Los Cinco Minutos de Dios – Alfonso Milagro
Etiquetas: Alfonso Milagro, disgusto, enojo, metras
Noviembre 30th, 2008 at 13:36
no es facil pero seria bueno intentarlo ya que todos nos enojamos a veces no nos damos cuenta porque es parte de nuestra personalidad fer